22 jun 2007

Un libro más

Porque definitivamente hay libros que vale mucho la pena compartir, y sobre todo recomendar, aprovecho la ocasión para ello. Les comparto un puñito de frases del libro Éste que ves de Xavier Velasco (y por supuesto no se pierdan Diablo guardián):

-Uno a veces se agarra de los ogros pequeños para no ver entero al monstruo que está en frente.

-(...) pero las tumbas tienen lápida y epitafio. Están ahí para que la memoria nunca quede perfectamente sepultada.

-Los grandes pueden hacer lo que quieran, hasta las bromas se las toman en serio. Con los niños es al revés, todo lo que uno hace creen que es para jugar.

-Si tengo que creerme las mentiras, por lo menos que sea yo quien las inventa.

-Creo que eso es lo pero de estar encarcelado: tener miedo a salir.

-Contar historias - y peor, la propia historia - entraña hacer pedazos lo que estaba entero y armarlo ya no con la idea de que alguna vez vuelva a funcionar, sino de cuando menos llegar a comprenderla.

-Escribir no es ganar sino, echar a perder. Es saber que se va directo al error y aún así avanzar porque al cabo la meta es extraviarse.

-Escribir es lanzarse a perder todo por nada, creyendo que no hay otra forma de ganar.

-Leemos y escribimos las historias no porque necesariamente pasen, sino porque nos pasan. Cuando un lector henchido de entusiasmo nos anuncia: "¿Sabes qué libro acabo de leer?", el brillo de sus ojos parece preguntar: "¿Sabes qué me pasó?". No pasó, me pasó, por eso necesito contarlo.

-Leemos y escribimos por la misma razón que la gente se tira de un avión: nos urge ya meternos en problemas.

-Cuando uno llora así, a válvulas abiertas, siente que el tiempo pasa por las lágrimas.

-Dicen que con llorar nada se arregla, pero eso no es verdad. Llorar es hacer algo, aunque ese algo no sirva más que para quitarnos la sensación insoportable de no hacer nada. Estamos aguantando el paso de las horas, eso tendría que ser bastante. Estamos maldiciendo nuestra suerte, aguardando quizá que alguien adentro no lo soporte más y decida hacer algo para cambiar las cosas.

-Uno quiere contar historias nuevas y termina contando la de siempre, igual que va y se compra ropas nuevas para ser otra vez el de toda la vida. Uno mira hacia atrás y entiende tanto como cuando pretende mirar al porvenir. No se entiende la vida, ni el amor. Por eso hay que contarlos, para que haya un atrás, un adelante, un arriba, un abajo, un así eran las cosas y un éste era yo.

-No soporto la idea de hacerme grande ahora, sólo porque es la hora de terminar la historia, y además uno escribe para pelear contra lo insoportable.

No hay comentarios: